martes, 28 de mayo de 2013

LA COSTUMBRE DE LA MACETA

Un viejo cuento, del cual ya no recuerdo su autor, contaba que un tipo paseaba por una vereda y desde un balcón le cae una maceta en la cabeza. Dolorido piensa "fue un accidente".Al otro día, paseando por el mismo lugar, la maceta le vuelve a caer. Piensa "ayer fue accidente, hoy ya es casualidad". El tercer día le vuelve a suceder lo mismo y piensa "ya no es casualidad, esto ya es una catástrofe". Al cuarto día decide cruzar de vereda y sin embargo, por un fuerte viento, la maceta le vuelve a caer en la cabeza. Sentado en el piso por el golpe reflexiona: "Evidentemente no es accidente, ni casualidad, ni catástrofe. Es la costumbre de la maceta"
Esto viene a clara colación que el ciclón tiene la costumbre de empatar.
Y no hay rival que venga: último o puntero, primera fecha o última, el ciclón empata.
Y si no fuera por dos minutos adicionados, tampoco hubiese perdido en la única derrota que lleva en este torneo.
Este sábado, bien tempranito y no apto para madrugadores, el rival fue el puntero mismo, que se hallaba
cómodo en su punta, sin rivales cerca y con la seguridad de vencer a nuestra escuadra de viejotes empatadores, aunque seguramente habían tomado nota del triunfo frente a los segundos.
Y peor fue su asombro cuando a menos de cinco minutos un bello centro de Guille hizo que el Ejecutivo convirtiera por primera vez en el torneo, con ayuda del arquero.
Y se vinieron, pero el ciclón demostró que en este torneo está para dar batalla a cualquiera, se llame Nietzche o Socrátes mismo.
Un buen partido defensivo, un mediocampo batallador y una delantera peligrosa, hicieron temblar al puntero, el cual tuvo una clara que Robocop salvó a su estilo.
Los cambios del segundo tiempo menguaron la estructura, pero no el corazón.
La expulsión de Villares a los 12 del ST hizo que los rivales inflen el pecho. Más aún cuando minutos antes el Ejecutivo marró un gol increíble.
Y llegó el empate en buena jugada rival y se vio en forma evidente el cisma en el equipo: los que querían ganar aún con uno menos y los que querían empatar.
Y se dio la costumbre, mientras Trapo aún hoy domingo está en la cancha yendo lentamente, muy lentamente, a sacar un lateral.

lunes, 20 de mayo de 2013

Despacito, despacito...


Y sí, se tenía que dar.
Ya el Ciclón venía mostrando muestras de templanza en todo lo que va del torneo.
Y si bien el rival venía con chapa de firme seguidor del puntero, la chapa se le venció cual Dodge 1500 a los diez minutos del partido.
Esos primeros diez minutos fueron complicados, pero luego el equipo se ordenó, empezó a circular la pelota y aprovechar a un Ejecutivo inspirado, mientras Cable se la pasaba dialogando sobre crochet con el 4 rival.
Luego de la salida del Capitán Frío, quien por las bajas temperaturas se sentía como en casa, la dupla del doble 5 se escalonó bien y ya los rivales se miraban confundidos ante este equipo de viejos chotos aguerridos.
Un tiro rival en el travesaño, un par de tapadas de Robocop fueron los únicos llamados de atención, mientras Nico se erró un gol como si se tratara de Caruso mismo.
El segundo tiempo, ya sin el Ejecutivo, plantó un equipo desequilibrado en el medio, que sobrevivió los empellones de los rivales con mucho orden, mucho azar y mucho huevo.
Y así, con habilidad propia de estrategas que de esto saben mucho (aclaro que no es casi nunca nuestro caso), un pelotazo largo para aprovechar la velocidad de Cable, un rechazo flojito del guardameta y la saeta flogger que la empuja.
Gol. Gooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooool.
Trapo festejaba moderadamente: si teníamos suerte aguantábamos y nos empataban nada más.
Y los segunditos se miraban entre sí, protestaban todo, lloraban todo, moqueaban todo, mientras Villares le pegaba patadones a propios y extraños. Por suerte el hijo del Oso dormía sino la ligaba también...
Un gol bien anulado, dos tapadas de Robocop, el medio corriendo maratones y Guille jugando como segundo arquero hicieron los últimos quince un verdadero sufrimiento, mientras el Boli gritaba "tengo 4" y Sebastián pensaba que jugaba de Garrincha (bien abierto y sin marca)
Y Nico que se despierta, y Cable que va, y a cobrar... 2 a 0 y segunditos, las pelotas, ahí va el Ciclón con la valla menos vencida de la zona.
Mensaje claro para los punteros, próximo sábado: A entrenar en la semana, que a estos viejitos nadie los pasa por arriba (salvo que se crucen con Villares...)

martes, 14 de mayo de 2013

La vuelta del Mago

Magia, amigos, magia y otro empate.
Seis partidos jugados, 4 empates (casi 5), una derrota sobre la hora y un triunfo.
Magia y belleza, diría el filósofo Trapócrates.
Y si, por arte de magia y alegría de la juventud trapista (seguidores de Martin Cao, quien osó decir post partido que el partido perfecto es un 0-0, en una muestra de lirismo puro) otra vez empató el equipo.
Un empate costoso, contra un buen equipo en la ofensiva, aunque defensivamente eran flojos. Por suerte los DT se dieron cuenta de ello y pusieron dos delanteros que no lastiman ni a una defensa de metegol, para lograr mantener el empate.
Y cuando el partido parecía sucederse en errores y derrota, el Mago (quien ya había marcado un gol en el primer tiempo luego de un centro) sacó un tiro libre de la galera y el empate volvió a suceder.
El equipo terminó con 10 dada una nueva expulsión del Vasco, quien para no poner una excusa para faltar el próximo sábado, se hizo echar.
Buen partido de Nico, quien en función de enganche que no engancha fue el más creativo de la escuadra. Quizás deba pensar tirar el pase e ir a buscarlo...
Mención especial merecen el Oso y Martín, quienes cojos asistieron a la cancha a ver un partido de fútbol.
Por suerte, en la cancha de atrás, sucedió...
"Si no se gana, se empata. Y si vamos ganando, el empate tampoco está mal"... Trapócrates